Te
invito a un café, si me regalas un momento, una charla, unas risas, una tarde
sin prisas.
Te
devolveré mil aventuras, mil historias, miradas, besos, carantoñas, te regalaré
mil y una sonrisas.
Que
sea el café más largo del mundo, que dure toda una vida, que dure una eternidad.
Que se detenga el tiempo, que la vida nos diga cosas, que la soledad quede sola.
Que
mi corazón tenga seis millones de motivos, seis millones de razones, que salte
de alegría, que salte de emoción. Qué las distancias, sean cortas, que cada
minuto sea eterno, recordado, que merezcan la pena las horas que nos hemos
dedicado.
Que
esto merezca la pena, que nuestros sueños no se queden solo en sueños, en simulacros
de fantasía, en amagos de alegría.
Porque
hace tiempo que vivo al filo de un deseo, al borde de un sueño
Me
quedo este sueño, si en él estás tú, me quedo esta vida si la comparto contigo.
Porque a donde
vayas, iré, donde estés, allí estaré, y donde sueñes, soñaré. Que tus sueños
sean los míos, tu felicidad, la mía.
Que el
camino nos lleve juntos y que mi futuro sea a tu lado
Porque inspiras
mi locura, y si
en la locura está mi felicidad, benditas las locuras, si me llaman loco, que me
llamen
Ven,
acércate, hagamos que esta locura merezca la pena
No hay comentarios:
Publicar un comentario