
Saldrán a la palestra las promesas, las mentiras,
con que nos suelen intentar convencer. Si, promesas por aquí, promesas,
promesas por allá, promesas y más promesas. No será una campaña propiamente
Europea, tendrá tintes nacionales.
Porque unos nos dirán que la cosa va bien, que la
economía empieza a mejorar, que nuestro país ha salido de la crisis y que ya se
ve la luz al final del túnel. Dirán también que ya empezamos a crear empleo,
aunque lentamente y un poco precario, pero la cosa irá en aumento y mejorando.
Los otros hablaran de precariedad laboral, de
subidas de impuestos, de política errónea, de caos, de mentiras por doquier.
Se atacaran con que si hubo contabilidad B, hablaran de sobres, sobresueldos, de corrupción por aquí, trapicheos por allá. Los otros harán lo propio con los ERES, los fondos de formación para desempleados, de malversación, etc.
Y todos, hablaran de que siempre han sido legales
en todos y cada unos de sus hechos, que la transparencia es su bandera y que la
corrupción es un invento del otro partido, una trama, un argumento para minar al
opositor.
Unos dirán que ya se podrán bajar los impuestos,
que su política es la mejor, que Dios nos libre de que gane el contrario. Los otros
dirán que desharán lo hecho por los unos, eliminaran impuestos, que volveremos
a tener la sanidad pública gratuita, becas para todo el mundo, nos prometerán
un nuevo plan de estudios, subida de sueldos, etc. En definitiva, gane quien
gane, vamos a vivir como Dios.
Nos dirán que las cosas van a mejorar y mucho. Los
otros propondrán no seguir acatando las políticas impuestas por Ángela Merkel.
Nos dirán que defenderán la pesca, con uñas y dientes, solicitaran a Europa
ayuda para combatir la inmigración, etc. y todos crearan miles y miles de
puestos de trabajo.
Y el domingo 25, por la tarde, comenzaremos a
escuchar cifras, datos, estadísticas, risas, cava y fiesta, porque “en términos
relativos” todos ganarán.
Y así, tendremos 54 eurodiputados de un total de
751, señores que debatirán y aprobaran la legislación de la UE. Discutirán el
presupuesto, la reducción del déficit o las ayudas al empleo juvenil o
discutirán sobre la política migratoria.
¡¡¡Pero!!! No nos engañemos, aquí, las cosas
seguirán como siempre o peor. El paro tardará mucho, muchísimo en bajar, los
trabajos serán cutres, los ricos serán más ricos y los pobres, más pobres o ¿se
puede ser más pobre no teniendo nada?
Seguiremos siendo el país en donde es más caro ser
autónomo, los segundos en número de parados. Los sextos el precio más caro de
la electricidad y podría seguir dando datos, pero tampoco quiero enojarme y todo
esto con un tercermundista salario
mínimo internacional.
Seguiremos teniendo 350 diputados y 260 senadores
que no se qué coño hacen, además de asegurarse un buen futuro.
Diputaciones, Secretarias, Asesores, Cargos de
confianza, Aforados. Coches de alta gama, choferes, guardaespaldas. Gastos en
su mayoría innecesarios, que pagamos con nuestros impuestos. Pero eso, a sus
señorías poco les importa.
Rollos y mentiras para seguir igual o peor.
ResponderEliminarBesos