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domingo, 27 de mayo de 2012

Soy feliz


Tiene los ojos muy abiertos y redondos,  una mirada viva,  llena de alegría, tiene el pelo oscuro, su piel es blanca y suave, y su sonrisa… contagiosa.
Cuando duerme, me gusta contemplarla, observo sus gestos y vigilo sus sueños, me paso horas y horas mirándola.
Cada mañana, cuando se despierta, yo ya estoy esperando ese momento. Me hago la dormida y la miro con disimulo, esta quieta, mirando al techo, agitando las manitas o chupando los dedos de los pies, luego cuando se cansa, se gira hacia mí y agarrándose a los barrotes de la cuna, se levanta y me llama “maa,… maa”. Con los ojos semi cerrados, mi mano se desliza hacia su cuna, como si fuera una arañita, ella la ve y me sonríe, es esa sonrisa que me levanta del suelo, me coge la mano e intenta comer esa arañita, me llena de babas, pero no importa, le hago cosquillas, se ríe a carcajadas, soy feliz.
Sé que tiene hambre y me levanto para prepararle su biberón, ella lo sabe, así que se queda tranquila, esperándome.
La cojo en brazos y me la llevo para mi cama, le doy el bibe y la miro, no dejo de mirarla, mientras lo toma, juega con mi pelo, me mira, soy feliz.
Al terminar la acuesto, se queda quieta, muy tranquila, como agotada, me acuesto a su lado, juego con su mano y se vuelve a quedar dormida, la acuesto en su cuna y duerme una hora más, soy feliz.
Cuando se despierta, yo no estoy a su lado, estoy preparando el baño y escucho otra vez su llamada “maa...maaa” acudo a su lado, me recibe con esa sonrisa que me alegra el día. Las dos nos metemos en el baño, ella juega con el patito y con la ranita, chapoteando, mientras yo con la esponja voy recorriendo suavemente su piel.
La visto, le pongo ese vestidito estampado, la peino, le echo un poco de colonia, me mira y me sonríe, sabe que vamos a la calle.
Y así es cada día. Soy feliz porque la veo crecer, porque comparto con ella los mejores momentos de mi vida, disfruto de su presencia, de su cariño, de sus miradas y de su risa contagiosa.
Soy feliz porque así es mi pequeña Xiana, la niña de mis ojos.

Elena.






2 comentarios:

  1. Tienes toda la razón, nada puede dar mas felicidad que un bebé...
    Besitos en el alma
    Scarlet2807

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  2. Son los ángeles más hermosos que Dios pueda mandarnos en nuestra vida, su llegada, es una forma de decirnos: TE AMO y se que existes.

    Dios bendiga a todos los bebés, en especial a mis sobrinitos.


    Mexicanita





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