De las veces que la perdí, me quedo con los
reencuentros.
De sus miradas, con todas, incluso con las que me
dedica cuando está enojada.
De sus besos, recuerdo todos y cada uno de ellos,
pero los especiales los guardo entre las páginas de mi diario.
De su sonrisa, me gusta todo, su forma y su sabor,
su belleza y su color.
De sus noches, las horas despierto, los paseos, la
pasión, sus locuras, las mías, los apretujones, los besos por los rincones.
De su forma de ser, su carácter me puede, su pronto,
me apasiona, su dejar pasar las cosas que van caducando.
Me enciende, me irrita, me vuelve loco
cuando me sorprende. Sueña despierta, sueña dormida, siempre se esconde detrás
de la puerta.
De sus enfados, no recuerdo nada. Porque he
aprendido a quedarme con lo bueno y dejar de lado lo malo
¡Has vuelto!!!. Me alegro, con lo cual seguiré disfrutando de lo que escribes.
ResponderEliminarbesos
Un canto al amor que se desborda en sentimientos de un lirismo que sale del alma cuando amamos con toda la intensidad.
ResponderEliminarBuen fin de semana y un abrazo.
Ángeles