Querida Fátima:

Hoy mientras tomaba el café en la cafetería de siempre, y ojeaba la prensa, escuché, la conversación de los vecinos de mesa. Él le contaba a ella que venía de firmar el alta de autónomo, que estaba cansado de dar vueltas y vueltas y se había decidido a crear una pequeña empresa. Ya no era un crio y se le veía contento, aliviado y esperanzado.

Enhorabuena, querida Fátima, hoy hay un parado menos en las listas de INEM, hoy quizás unos de esos que no entran dentro de vuestros “parados favoritos”, los jovencitos menores de treinta, esos que posiblemente no tengan una hipoteca que pagar, ni un colegio al que enviar a sus hijos, ni dar de comer a nadie más que a sí mismo, se ha decidido a ser autónomo.

Si, quizás cansado de recorrer empresas, curriculum en mano, aceptando trabajos de mierda, con míseros sueldos, se haya decidido a arriesgarse y tirar palante por su cuenta. Cerrando los ojos y saltando al vacio en un intento de sobrevivir a esta crisis que no sabéis como afrontar, y que dicho sea de paso os preocupa poco, o más bien solo lo justito para ganaros vuestra merecida jubilación de oro en solo siete años, ¡acojonante!

Hoy quizás ese osado emprendedor, tenga que trabajar mucho y duro para pagar esa hipoteca, ese colegio de los niños, esa universidad para que su hijo mayor tenga un “futuro”, aunque sea negro, trabajar duro para llevar algo que comer a casa y claro, para pagar esa excesiva cuota de autónomos de 300 euros al mes, solo porque ya no es un jovencito. Que lastima que no naciera más tarde, entraría dentro de vuestros cacareados planes de ayuda al emprendedor y sólo pagaría 50 euros/mes, algo es algo.  Pero muchos, somos de otra quinta y  pagamos los 300 euros si queremos tener una jubilación de mierda.

Quizás a partir de hoy ese autónomo emprendedor, empiece a dormir mejor, o peor, quien sabe. Quizás las cosas continúen igual, quizás los bancos sigan empecinados en no dar créditos, quizás los parados sigan aumentando y quizás todo esto, haga que la gente consuma menos, con el consiguiente resultado, crecimiento negativo y cierre de empresas. Pero el seguirá adelante y al menos lo habrá intentado.

Pero que sepas querida Fátima que no será gracias a ti, ni a Mariano, ni a los 5.000 asesores que tenéis, que dicho sea de paso, no sé qué coño os asesoran. Porque ya me dirás donde están vuestros planes para la creación de empleo. ¿He dicho planes? ¿Qué es eso? Lo digo porque da la sensación de que no sabéis para donde tirar, y lo que es peor, ni por dónde empezar.

Pero seguro que ese nuevo autónomo te pediría un favor, y si no te lo pido yo por él. Ya que sigues, o seguís encoñados en ayudar solo a los jovencitos, no lo incluyas en tus cifras de creación de empleo, no incluyas a los que no nos llegan tus “ayudas”.

Porque muchos, de esos 20.454 autónomos que dices que se han dado de alta gracias a ti, no son jovencitos, sino mayorcitos que se ven obligados por la necesidad a emprender Sr. Ministra, y si, muchos lo hacen porque no les queda más cojones.

No eres merecedora de ese “honor”. Seguro que ni él ni yo, ni otros muchos, queremos que te cuelgues medallas por nosotros, no nos has regalado nada, y si tienes un mínimo de dignidad no hables de cifras con tanta alegría, a no ser que, como siempre lo haces, sea para salvarte el culo y el privilegiado puesto de trabajo que ocupas.

Esto, querida Fátima, y perdón por la confianza, te lo cuenta un ex votante de PP, y realmente espero que no sea el único. Pero que no se excite el PSOE, porque para ellos también tengo mi opinión y creerme, no es muy buena.