Seguidores

domingo, 24 de enero de 2016

Porque me toca



Estoy a un paso de la felicidad, a treinta minutos de la locura, a quince metros del deseo y a un sueño de ti. A un grito, a un mate, a sesenta segundos de un disparate.
Con mis escritos haré barquitos, con mis sueños un avión, con mis manos un refugio y de mi vida una canción. Liberaré mi colección de mariposas, mis soldaditos de plomo, a sus cuarteles en su caja de cartón.
Te robaré sonrisas, reciclaré tus abrazos y lavaré con lejía las manchas que deja el dolor. Viviré con lo puesto y le haré trampas a la muerte, puesto que no tengo vida de repuesto.
En mi próximo cambio de piel, me mimetizaré para pasar algún ratito a  tu lado. Exploraré tus formas y soñaré una vez más que aquel sueño se hizo realidad.
Seré feliz, lo sé. Seré feliz porque me toca y porque he preparado mi entorno para ello. Sé que viviré al filo de lo imposible, al borde de la locura, al lado de mis amigos, cerca de la alegría.
Me acostaré cuando tenga sueño. Miraré las estrellas antes de dormir y quizá, con el tiempo encuentre una que brille para mi, una que por alguna razón me recuerde a ti.
Seré feliz porque me lo he propuesto y hoy, es un buen día para empezar el resto de mi vida. Para ello, saldré de mi letargo, regresaré al lugar donde nací, allí donde quiero morir. Construiré una casita con mis manos, una casita de piedra, madera y cristal. Tendré un gato que se llamara Paco. Dormirá cerca de mí y me hará compañía y la vida más fácil
En mi mochila llevaré solo mis pertenecías más preciadas, la esencia de tu perfume, una de tus miradas y un recuerdo lejano.
No estarás tú, quizás tus recuerdos, los sueños en los que te encontré, las cartas que una vez te escribí y el poso de las noches que te amé Escribiré de esto, de aquello y de lo que surja y no daré explicaciones a nadie sobre mis acciones.
Seré feliz porque si, porque me toca. La soledad será mi compañía, viviré tranquilo y sin hacer ruido.

sábado, 16 de enero de 2016

No me acostumbro



No me acostumbro a tus cómos, ni a tus porqués. A tus yo soy así, a tus exigencias, a tu extraña vara de medir, al tu puedes y yo no.
No me acostumbro a tus ausencias, a tu indiferencia, a tus negativas, a tu orgullosa forma de ser, a tus repentinas huidas.
No me acostumbro a vivir sin ti, pero tampoco a tu lado. Mi casa se hace grande y mi cama está fría. Extraño esto, aquello y lo de más allá
El tiempo se detuvo aquella tarde, en aquel querer saber, en aquello tan normal. El tiempo se detuvo en un extraño sinsentido, en otra de tantas
Sin ti los días duran una eternidad, los relojes de casa se han detenido como por arte de magia aquella tarde.
Cuando yo digo que si, vas tú y dices que no, cuando más te necesito más te alejas
Quisiera volver al mañana y recuperar el tiempo futuro, ponerme en tu lugar para saber conocerte
La vida puede empezar a la vuelta de la esquina, encontrémonos allí.