Soy de
donde el tiempo va más despacio, de donde la tristeza es un recuerdo del pasado,
el cáncer un signo del zodiaco. De dónde los sueños siempre aciertan, las
locuras son conocidas, las llamamos por su nombre, las lágrimas son de caramelo,
y los desfiles son de emociones.
Soy de
donde un atardecer es rojizo, el agua cristalina, de donde el viento nos besa
la cara. De donde los abrazos recomponen, las dudas se disipan en el aire, de
donde uno no busca el amor, lo construye día a día.
De donde
yo soy, el cielo es una estación de metro, las nubes relleno del colchón, los
besos son de colores, vuelan, los capturamos para luego soltarlos y verlos
volar. Mis sueños viven
en tus cristales, en
el menú nunca hay tristeza, el orgullo no existe, la sonrisa es tranparente.
Allí está prohibido prohibir.
Soy de
donde los soldados son de plomo, las guerras solo están narradas en antiguos libros
de historia. Los políticos lo son por vocación y solo le roban tiempo al
tiempo. Donde tomamos pastillas contra el dolor ajeno, jarabe para recuperar el
tiempo perdido y la
tristeza es solo un adjetivo en desuso.
En
donde yo vivo lo imposible, solo cuesta un poco más, cuando lo necesitamos,
charlamos con la luna, hacemos vida en el presente. Trasnochamos cada día, soñamos
cada noche, regalamos tiempo, cariño, abrazos, mimos y te quieros.
De
donde yo soy, los niños chapotean en los charcos, juegan al fútbol en la
calle, no hay letra pequeña en los contratos. Donde nacen las palabras, donde se
almacenan los recuerdos y como en otros muchos sitios, después de la tormenta
viene la calma.
Soy
buena gente, hago los poemas con miradas, con sonrisas y con abrazos, trato de prolongar tus periodos de
felicidad. Lleno los vacios con muchos y pequeños detalles, saludo al llegar, me despido al
marchar.
Soy como soy, soy de
donde soy.
Te debía
este sueño y lo soñé, te debía un amanecer y desperté.
Maravilloso lugar, dime de donde eres que me marcho a ese sitio, donde las guerras no existen, donde los niños no mueren de hambre, donde los políticos cumplen sus promesas, donde los hombres no son torturados...y las violaciones no saben lo que es, porque esa palabra no existe en su diccionario.
ResponderEliminarMe has emocionado y atrapado en ese bello sueño... y como dijo el poeta, los sueños, sueños son pero son necesarios para esperar un nuevo amanecer.
Un abrazo con alas de sueños bellos.