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viernes, 23 de agosto de 2013

Mi mundo



Cansado de la gran ciudad, del ruido de los coches, del ajetreo urbano decidí abandonarlo todo y buscar mi felicidad en otro lugar, así que sin pensármelo dos veces, me fui a un valle lejos de todo y allí me dio por crear un mundo a mi medida, mi mundo.
Es un valle precioso, de un verde intenso, con muchos árboles y un rio que con sus meandros lo serpentea, regando todo a su paso, es poco profundo y con aguas cristalinas. Tiene una pequeña cascada que acaba en un lago de aguas tranquilas donde a veces nos bañamos.
En otoño los arboles cambian de color, unos siguen siendo verdes, pero otros se vuelven amarillos, rojos, granates, tendríais que verlo para creerlo. Yo si lo he visto y me sumerjo en sueños contemplando esa belleza. Al llegar el invierno un manto blanco cubre todo el valle.
Mi mundo no es muy grande, no necesito muchas cosas para vivir. En él, vivimos mi gente, mis amigos y todo aquel que quiere ser feliz.
Allí, en mi mundo, las estrellas son de colores y tamaños diferentes.
El sol y la luna son grandes amigos, parece que estuvieran enamorados, a veces el sol se acerca tanto a la luna que se recuesta sobre ella haciéndole carantoñas, dicen que es un eclipse.
Las nubes cuando las hay, son de algodón y cambian de color, al amanecer son azules pero al atardecer se vuelven de color rosa, la luz que filtran es increíble y hacen que se respire una paz difícil de encontrar en otro lugar.
Dormimos en unas hamacas colgadas de los arboles, la sensación de flotar multiplica el descanso y desde allí, vemos como las luciérnagas se reúnen para luego dispersarse e iluminar todo el valle, la luz que transmiten es de una belleza que todavía no he sido capaz de describir.
En él hay algunos animales, ciervos, caballos etc., también hay muchas aves de distintos tamaños y colores.
A cualquier hora podrás ver besos voladores que revolotean por doquier, dejándose tocar, vuelan haciendo ese ruido que los caracteriza “muak – muak “
Allí no hay coches, ni motos, todos nos desplazamos por unos caminos de viento; abrimos los brazos y nos dejamos llevar hasta donde queremos ir.
En mi mundo no hay normas, entra quien quiere, quien tiene buen corazón y todo el mundo es bien recibido. Allí está prohibido prohibir, el tiempo se toma su tiempo,
la luna toma el sol de madrugada
Mi mundo está hecho con nuestros sueños.
Así es ahora mi hogar, en el intento ser feliz con los míos y con quien quiera participar de nuestra felicidad.

lunes, 19 de agosto de 2013

Otra victima de la crisis



Lo veía prácticamente todos los días, era Manolo, no sabía su apellido hasta que hoy, lo he visto en la prensa. Manolo Dono, así se llama y así ponía en su toldo amarillo.
Hace unos días que José el de la cafetería que está debajo de casa, me comento que cerraba el kiosco. Me dijo que Manolo le había dicho que la cosa no iba bien, que ya no era lo de antes, que ya no se vendían periódicos, ni revistas, que lo estaba pasando mal desde hacía unos meses y aunque el pequeño local era de su propiedad, la cosa había bajado mucho.
José estaba preocupado porque no encontraba quien le trajera cada dia los cinco periódicos que compra  y como él unos cuantos del barrio.
Manolo cada día estaba allí, a la puerta de su pequeño local, paseando por la acera, charlaba con unos, cotilleaba con otros, con su inseparable cenicero que ponía en una pequeña banqueta al lado de la puerta, un cenicero blanco, aunque oscuro por el uso y siempre lleno de colillas, Solía llevar un chaleco azul de Fernando Alonso de su época en Renault.
Fueron catorce años de su vida, catorce años trabajando cada día, desde las 7 de la mañana, sábados y domingos incluidos,  vendiendo periódicos, revistas del corazón que por supuesto también leía, coleccionables, alguna chuchería que otra y no se que más cosas
Con este cierre, el barrio se queda un poco más desangelado es otro negocio que se cae víctima de esta puñetera crisis.
Y así, cada día, al pasar, miro si la peluquera tiene trabajo, si el restaurante también. Porque cada día cuesta más llegar a fin de mes.
¿Cuántos pequeños negocios más tienen que cerrar? Si no ponen remedio pronto, a este paso muchos.

miércoles, 14 de agosto de 2013

Turismo morboso



No hace mucho, escribí algo sobre el morbo que le produce a algunas personas ver como unos tigres se devoran a una vaca que sueltan en un recinto cerrado, pagan por ello, disfrutan el momento y sacan fotos para la posteridad.
 Y el otro día, al ir de fin de semana, pasábamos por delante de una nave en la que estaban depositados los vagones del tren siniestrado no hace mucho, aquí en Santiago y había gente que se había parado y miraban como si de un acontecimiento interplanetario se tratara. Hacían fotos y grababan con sus cámaras o móviles.
Luego escuchaba en las noticias de la radio, que la locutora aconsejaba leer un periódico el artículo titulado “Turismo de Catástrofe”,  eso me llevo a leer ese artículo. En él nos describe como la gente, familias enteras acuden a la ya famosa y triste curva, para sacar fotos, e incluso llevarse a casa algún recuerdo, un trozo de cristal, cualquier cosa puede valer, seguro que queda muy bien en una estantería.
Me llamo mucho la atención una frase, decía “Angrois ha dejado de ser lugar de paso para convertirse en un destino” La verdad, no me sorprendió, todavía recuerdo las peregrinaciones que hubo en su dia, para ver el barco Casón, que embarranco frente a las costas de Finisterre, no había donde aparcar.
Pero el turismo morboso existe, es algo innato en los seres humanos, algunos lo tienen más pronunciado que otros y no dudan de acudir un domingo a ver como es el lugar donde ha ocurrido algo, a que huele, que sensaciones se perciben.
Y tirando del hilo, encontré otros casos en los que se ha dado y se continúa dando este turismo, recordemos sino:
Amstetten. Los turistas acuden en masa para ver la casa en cuyo sótano permaneció encerrada durante 24 años Elisabeth Fritzl. A diario llegan turistas de Hungría y Alemania que se hacen fotos delante del domicilio familiar, pese a que éste está vigilado por la Policía austriaca las 24 horas del día. Praia da Luz, el caso de Madeleine McCann sigue sin estar resuelto un año después de que la pequeña desapareciera de un complejo turístico del Algarve, en Portugal. No importa el dolor de los padres que continúan la lucha por encontrar a su hija. Los visitantes son, principalmente, portugueses, pero también hay españoles y británicos.  Phuket, después del tsunami que arrasó la zona, muchas agencias comenzaron a organizar paquetes que llevaban a los visitantes por el resort Khao Lak (que quedó en ruinas) y por un templo que se empleó de depósito de cadáveres, todo ello por 42 euros (el tour incluía dos noches de alojamiento). Además, los turistas podían comprar fotos de cadáveres y camisetas conmemorativas del maremoto.  Nueva Orleans, en 2005, después del paso del huracán Katrina que arrasó toda Nueva Orleans y aunque muchas familias todavía no han podido volver aún a sus casas, los turistas llegan a la ciudad estadounidense y posan sonrientes frente a las casas derruidas y los carteles arrancados de los comercios.

Soham, esta pequeña ciudad de Inglaterra que se hizo famosa en 2002 cuando dos niñas  Jessica Chapman y Holly Wells, fueron secuestradas y asesinadas por Ian Kevin Huntley. Días después de su muerte, los turistas, fundamentalmente británicos, llegaban a la localidad inglesa para ver y fotografiar el lugar.  Puerto Hurraco, de este hace la friolera de 18 años, pero ya de aquella provoco su turismo. Pero el estreno de la película basada en este hecho, hizo que se dispararan las visitas. Y el televisado caso Alcàsser. El asesinato de Miriam, Toñi y Desiré mantuvo en vilo a gran parte del país durante años. Alcàsser, el pequeño pueblo valenciano en el que sucedió la tragedia, ha visto cómo los turistas peregrinan desde 1992 a su cementerio, en el que hay una estatua que recuerda a las tres jóvenes fallecidas.
Supongo que habrá muchísimas más y seria largo, espeso e incluso desagradable de recordar.
¿Qué es lo que nos atrae de estas cosas? Puedo entender que si pasas por allí en ese momento o un tiempo después por casualidad o coincidencia, te pares para ver lo que ha pasado o recordar lo que pasó, está dentro de los parámetros de la “normalidad”. Pero ir a pasar una tarde de domingo al lugar de una desgracia, para traerse algún recuerdo y 425 fotos, no me parece “normal”. ¿o será que está esta considerado como cultura general? 
En fin, es solo una opinión.





jueves, 8 de agosto de 2013

Camino de Caminantes



La historia del Camino se remonta al siglo IX con el descubrimiento del sepulcro de Santiago el Mayor, evangelizador de España. El hallazgo de este santo mausoleo está rodeado de una rica imaginería popular que en vez de distorsionar ha preservado y llenado de colorido la narración histórica.
Ya sea el francés, el de la plata, el portugués, incluso el inglés; el primitivo, el camino del norte, el camino del invierno o el camino del sudeste, todos llevan al mismo sitio. Andando, a caballo, en bicicleta. Haga frio, calor, llueva, o ventosee, el peregrino pone rumbo a Santiago de Compostela porque ésta, le llama.
¿Motivos? Básicamente religiosos, visitar la tumba del Apóstol, para pedirle algo, cumplir una promesa, incluso por conocer gente, algunos por espíritu deportivo. Los hay que buscan un reto y también quienes ansían una forma diferente de conocer lugares a ritmo de caminata, empachándose de ellos, sin prisa, saboreando cada metro, cada kilometro, de ese camino, compartiendo con los habitantes esas pequeñas cosas, un vaso de agua, o un poco de queso. Pero muchos lo hacen por encontrarse a sí mismos
Dicen los que lo han hecho que lo repetirán, que es algo que hay que vivirlo, hacerlo y sentirlo. También dicen que cambia a las personas. Es un camino lleno de leyendas, como el milagro del gallo y la gallina que sucedió en Santo Domingo de la Calzada o la Fuente de la Reniega, el misterio de los Obanos, El Poyo de Roldán, El pájaro y la Virgen, los Pastores de Estella o el milagro del Santo Grial. ¿Tú ya has contemplado un milagro? Suelen preguntarse unos peregrinos a otros, algunos están convencidos de haberlo vivido a lo largo del camino. 
¿El premio? La paz interior que cada uno encuentra, la Compostela, que se gana demostrando haber recorrido a pie los últimos 100 km antes de llegar a Santiago o 200 km si uno va a caballo o en bicicleta. 
Para los católicos, eso significa que el tiempo que se pasará en el purgatorio será la mitad. En año santo, la indulgencia sería plenaria.


jueves, 1 de agosto de 2013

No aprenderemos nunca



El otro día leía en la prensa algo que me dejo a cuadros porque era algo que ocurre por culpa de la estupidez humana. La noticia narraba como tres muchachas habían sido heridas por una bengala del espectáculo pirotécnico en una discoteca (móvil) en Noia (A Coruña).
Y es que no aprendemos. ¿Ya nos hemos olvidado de algunos casos?  Algunos, creo que sí. Veamos.
Febrero 2003.- Cien muertos y más de 180 heridos en el incendio de la discoteca "Station" de West Warwick, en el estado de Rhode Island (EE UU), causado por el uso de fuegos artificiales durante un espectáculo.
Diciembre 2004.- 193 personas mueren y más de 700 resultan heridas en un incendio en la discoteca República Cromañón en Buenos Aires (Argentina), cuando una bengala lanzada desde el público prendió fuego al techo recubierto de telas de la discoteca, cuyas salidas de emergencia estaban bloqueadas.

Diciembre 2009.- Mueren 156 personas y 160 heridos, tras incendiarse el céntrico club nocturno "El caballo cojo" de la ciudad rusa de Perm, debido al uso de fuegos artificiales en el interior del local, donde unas 300 personas celebraban el octavo aniversario de su apertura.
Brasil: 200 personas mueren en incendio en la discoteca Kiss a principios de este mismo año. El motivo, fue un espectáculo pirotécnico. Hay muchos más casos, solo daré los producidos por bengalas o fuegos artificiales.
Y tocándonos cerca ¿Ya hemos olvidado el caso del Madrid Arena? Pues señores, no esta tan lejano, fue a finales de 2012, en una fiesta de Halloween y murieron cinco jóvenes en una avalancha. Sólo eran unas niñas y han dejado su vida en una puñetera fiesta.
¿Que tiene que pasar para que los organizadores de macro fiestas y mini fiestas prohíban el uso de bengalas en recintos cerrados? ¿Cómo se permiten estas fiestas por parte de las autoridades, sin un control exhaustivo de las medidas de seguridad? ¿Cómo dejan entrar bengalas a este tipo de eventos? Son preguntas que todos nos hacemos después de un suceso como este. 
De repente, ocurre una desgracia y al día siguiente, todos nos echamos las manos a la cabeza, las autoridades imponen medidas, medidas que lamentablemente han vuelto a llegar tarde para las víctimas. Y volverán a llegar tarde para alguien.