De vez en cuando la vida y yo, tomamos café
juntos.
Hablamos de pasado, de presente, pero sobre
todo, hablamos del futuro y le he dicho
que voy a hacer limpieza mental.
Borrare odios y rencores, borraré penas y angustias y empezare a vivir
sin reproches. Enterrare mis miedos y desterrare mis fracasos.
Seré esa persona que siempre he querido
ser, mejor. Intentare recuperar las buenas costumbres,
algunas malas, también.
Seguiré soñando despierto, como hasta ahora
y pegare todos mis sueños en un álbum.
Dejare de envidiar a los que van al cielo, porque
quizás yo también vaya y viajare al sur del firmamento, siempre he querido
conocer mundo.
Seguiré compartiendo mi vida con la mujer
de mis sueños, ¿tu? Construiré un
castillo y viviré en él hasta que me muera.
Recuperaré la piel que he perdido en mi
última batalla y me bañare en las frías aguas del infierno. Aprenderé a hablar
al revés y no defraudare a quienes me han defraudado.
Encontrare el tiempo perdido y buscare
mi alma gemela, dicen que todos tenemos una.
Romperé una lanza a favor de la gente que
se lo merece.
Borrare de mi memoria los recuerdos que he
olvidado. Sacare brillo a la alegría que había perdido y repartiré corazoncitos
de felicidad.
Aprenderé
muchas cosas que solo se aprenden con el tiempo y ahora que tengo tiempo, apuraré estos últimos minutos de
mi vida, si puede ser, a tu lado.
No viviré
ni de día ni de noche sino todo lo contrario.
Algunas
cosas seguirán igual, y no hare nada por cambiarlas.
Cuando sea mayor seré simplemente, mayor y viviré feliz el resto de mi vida
Cuando sea mayor seré simplemente, mayor y viviré feliz el resto de mi vida
Y cuando me muera, viviré aquellas
cosas que no supe vivir en vida, pero antes de que me vaya, déjame abrazarte
sólo una vez más.
Porque el camino me ha enseñado que este es mi futuro próximo, el más cercano que alcanzo a ver
y el que me gusta, porque un buen día lo
tiene cualquiera y uno malo también.
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